25
Ago

Epístola de Amor a Benidorm: Posiblemente el Rincón más Feliz de la Costa Española

Benidorm, una vez vinculada con la «Manhattan española» y luego con Abu Dhabi en el apogeo de las megalópolis del Medio Oriente, ha evolucionado hacia algo singular. Sin embargo, evitemos las comparaciones apresuradas. Benidorm, nuestro escenario, está lejos de las metrópolis estadounidenses o asiáticas. Su transformación en epicentro del turismo de masas comenzó casi siete décadas atrás, cuando su alcalde de entonces, Pedro Zaragoza Orts, según cuenta la leyenda, viajó en moto hasta Madrid con un objetivo claro: convencer al dictador de levantar la prohibición del bikini en sus playas. Así, un tranquilo pueblo pesquero se erigió en una ciudad de rascacielos majestuosos. En la actualidad, Benidorm alberga a unos 70,000 residentes censados, superando en número a capitales provinciales como Soria, Zamora o Teruel. Y esa cifra se incrementa con la afluencia de visitantes durante todo el año. Si en sus inicios fueron los turistas escandinavos quienes exploraron sus playas, hoy son británicos, belgas y, sobre todo, locales, quienes buscan el mar y el clima templado en todo momento. Pocos conocen que Sylvia Plath, autora de «La campana de cristal», pasó su luna de miel aquí en 1956. Quedó cautivada mientras los primeros rascacielos y encantadores hoteles comenzaban a surgir. Benidorm lidera la lista de ciudades españolas en rascacielos y es la tercera en Europa. Más allá de ser percibido como ambicioso, su perfil vertical es un modelo de cómo podrían ser las urbes del futuro. Estas construcciones reducen la huella urbana y Benidorm ha sabido aprovechar los recursos hídricos en una región con escasas lluvias. Y eso no es todo: es una ciudad accidentalmente feminista. Como relata el libro «Ensayo y (error) Benidorm», las mujeres heredaron los terrenos en primera línea de mar, lo que resultó ser una bendición para la edificación. En resumen, Benidorm, más allá de comparaciones simplistas, ha labrado su propia identidad. Desde la conquista de la libertad playera hasta su distintivo perfil de rascacielos, esta ciudad en constante evolución guarda secretos que esperan ser desvelados.

En el corazón de la cuestión, dejando atrás las cifras, encontramos la esencia de Benidorm. A lo largo de décadas, especialmente en tiempos recientes, esta ciudad ha transformado su historia de críticas en un cuento de felicidad. Un rincón para disfrutar, relajarse y sumergirse en un mar cristalino y playas impecables. Acompañado de música en vivo desde la mañana, y sí, también de delicias culinarias, todo fluye al ritmo único de Benidorm. De despreciada por ser refugio de jubilados, nacionales y extranjeros, Benidorm ha tejido su renacimiento. Un lugar donde caben todas las edades, desafiando estereotipos. Playas acogedoras y accesibles, y en ellas, mujeres mayores que se preparan para un juego de cartas o un baile, un encanto especial. Esa aspiración a la serenidad es el sello de Benidorm. Si la playa de Poniente atrae a los nacionales, la de Levante es el imán para los extranjeros. Su paseo se convierte en escenario de artistas, desde leyendas como Michael Jackson y Madonna hasta actuaciones más locales, como la hija de Sticky Vicky o María Jesús con su acordeón. Este mosaico ha dado forma a una ciudad inclusiva y diversa, marcada por eventos como el Orgullo LGTB en septiembre. Desvelar la irresistible esencia de Benidorm es un reto. No es una ciudad para todos los gustos, y no merece un enfoque irónico. Benidorm es auténtico y sigue evolucionando, siempre con un rincón por descubrir y sorprender a sus visitantes.

Descubre Cinco Increíbles Lugares para Visitar en Benidorm

La Mejillonera (Pg. de la Carretera, 16). En el corazón de Benidorm, existe un rincón que parece sacado de un sueño: un casco antiguo con casitas blancas y bajas que merece ser explorado. Entre sus encantadoras callejuelas se encuentra La Mejillonera, un lugar donde el arte del tapeo alcanza su máxima expresión y donde los protagonistas son, por supuesto, los mejillones en todas sus deliciosas formas. Desde 1981, este lugar ha deleitado a sus comensales con almuerzos y cenas de calidad. Con precios asequibles y una variada carta enalteciendo los sabores del mar, se distingue además por su servicio impecable, siempre entregado con una sonrisa amable.

Benidorm Palace (Avenida del Dr. Severo Ochoa, 13). A solo cuatro años de alcanzar su medio siglo de existencia, este rincón en Benidorm se prepara para una celebración llena de significado. Cada noche, se erige como el epicentro del entretenimiento en la ciudad alicantina, ofreciendo una experiencia única de cena y espectáculo. Su escenario ha sido testigo de la grandeza de nombres como Nureyev, Charles Aznavour y Raffaella Carrá, pero también ha dado espacio a artistas contemporáneos como Fangoria, Camela y Abraham Mateo. Este espacio mágico acoge una diversidad de expresiones artísticas, donde la cena se presenta con gracia sobre manteles de hilo en un auditorio que brilla con encanto.

Rastro El Cisne (Av. de la Comunitat Valenciana, 67). En los límites del municipio de Benidorm, se encuentra un lugar que hará latir más rápido el corazón de los amantes de la decoración y el encanto vintage. Con música en vivo y un amplio bar que complementa perfectamente la experiencia de compra, este mercadillo es un verdadero paraíso para los buscadores de tesoros únicos. En su interior, descubrirás muebles al estilo Memphis, joyas Art Déco y una ecléctica selección de decoración que abarca varias épocas. Imposible resistirse a llevarse algo especial a casa, y en los meses de temporada baja, encontrarás aún más motivos para explorar sus tesoros.

Hotel Mercure (Av. de Panamá, 5). Recién cumpliendo su primer año de existencia, el Hotel Mercure se alza como un auténtico pionero en Benidorm. En medio de un entorno donde la opulencia es la norma, este establecimiento destaca por su compromiso de elevar los estándares. Es sorprendente encontrarse con un lugar que, en medio del exceso cotidiano, ha sabido encontrar su lugar. Sus paredes, bellamente decoradas por el artista Jorge Parra, adornan un edificio icónico de la ciudad que ha sido sometido a una intensa renovación, creando así un verdadero refugio de serenidad. Ya sea para disfrutar de su piscina, degustar un aperitivo o relajarse con una copa, este oasis es el lugar perfecto para escapar del bullicio y sumergirse en un ambiente de tranquilidad.

Restaurante Casa Tony (Edificio Los Gemelos IV, Av. de Cuenca, Local 27). En el corazón de Benidorm, entre una multitud de recomendaciones en línea orientadas al gusto británico, se alza un tesoro oculto: el Restaurante Casa Tony. Este clásico atemporal se ha ganado su reputación gracias a la satisfacción de boca a boca. Aquí, la esencia tradicional se fusiona con una carta excepcional de pescados frescos del día, ofreciendo una experiencia culinaria de mercado que no tiene igual. El ambiente y el servicio están a la altura de las expectativas, convirtiendo cada visita en un deleite. Si deseas probar los exquisitos arroces de la carta, no dudes en hacer una reserva y mencionarlo al propio Toni al momento de la reserva.